Al diseñar sistemas de procesos para la fabricación de productos electrónicos, el seguro es uno de los tres grandes retos en juego. En esto, Deerns puede plantear todos los escenarios posibles.
Es crucial estar al día de los requisitos siempre cambiantes de la industria de fabricación de productos electrónicos e integrarlos activamente en el diseño de los sistemas de instalaciones, así como en el impacto en el coste y en la prima del seguro. En este artículo analizamos tres retos principales que entran en juego a la hora de diseñar una instalación de fabricación de productos electrónicos:
- continuidad de la actividad
- seguro
- garantizar las normas de sostenibilidad.
Impacto del seguro
En la industria electrónica, las aseguradoras imponen requisitos cada vez más estrictos a los sistemas de instalaciones; esto requiere una consideración cuidadosa. En consecuencia, Deerns ejecuta modelos de cálculo que evalúan el peso del capex de los equipos, la continuidad del negocio y las primas de seguro por cada plan de negocio. Por ejemplo, una elevada inversión en los sistemas de instalaciones generaría escasos beneficios en cuanto a la continuidad del negocio y podría dar lugar a una prima más elevada.
El diseño de instalaciones de alta calidad requiere habilidades muy completas debido a la complejidad de todas las redes interrelacionadas: sistemas de electricidad, de datos y de climatización interior (HVAC). Cada sistema tiene sus propios requisitos. Por ejemplo, las salas blancas requieren diseños específicos de ventilación de aire para desviar gases y aire comprimido.
A la hora de evaluar el valor asegurable, la continuidad de la actividad es primordial, junto al valor de reconstrucción o a los daños por incendio. Los equipos dañados por el fuego resultan mucho más costosos que la inversión original, razón por la cual las aseguradoras imponen estrictos requisitos de seguridad. Uno de los requisitos más importantes de las aseguradoras es la delimitación de la Pérdida Máxima Previsible (MFL). El acordonamiento de zonas protege el proceso de producción del resto del edificio, lo que permite un funcionamiento seguro y minimiza el tiempo de inactividad. Otros requisitos de seguridad implican la instalación de sistemas de seguridad, sistemas antiincendios por rociadores o de extinción por gas.
Continuidad empresarial y energía
Uno de nuestros puntos de partida fundamentales al iniciar el diseño es garantizar la continuidad de la actividad empresarial y evitar, en la medida de lo posible, paradas totales o parciales de la producción. Los fabricantes de productos electrónicos requieren una disponibilidad de las máquinas excepcionalmente alta (en torno al 99%), respaldada por un suministro eléctrico fiable.
En consecuencia, diseñamos instalaciones eléctricas que garanticen la alimentación de reserva y permitan reducir la capacidad. Una configuración N+1 garantiza la alimentación de reserva para minimizar las interrupciones de la producción. También creamos sistemas que pueden reducir 1/10e o 1/2e de la capacidad total para reducir la producción (temporalmente).
Deerns está explorando las posibilidades de los edificios modulares de servicios públicos, que permiten que diferentes sistemas de edificios se comuniquen entre sí para el intercambio de energía, con el fin de mejorar la eficiencia de la producción.
Sostenibilidad
Además de los aspectos financieros, los objetivos de sostenibilidad de nuestros clientes también se sitúan en el centro del diseño de los sistemas de instalaciones. Las calderas de calefacción central y vapor se están sustituyendo por instalaciones totalmente exentas de gas. Diseñamos sistemas en los que las bombas de calor y las torres de refrigeración trabajen en sinergia, haciendo innecesaria la energía procedente de combustibles fósiles. Y diseñamos nebulizadores de aire para agua desmineralizada (ósmosis inversa) en procesos de producción que requieren niveles de humedad específicos.
Otro avance importante es el uso de trayectorias de temperatura más elevadas. Puede parecer contraintuitivo, pero es posible enfriar con agua a 30 grados si los propios procesos son más calientes. Cuanto más alta es la temperatura, menos energía se necesitará para acondicionarla. Enfriar el agua a 6 grados durante un verano caluroso consume mucha energía. Si se diseñan sistemas que funcionen con agua a 12 grados, se desperdicia menos energía en refrigeración. Esto permite utilizar agua a mayor temperatura para el proceso de refrigeración en las torres de refrigeración.
En Deerns contamos con la experiencia necesaria para prepararnos de forma proactiva para los retos del futuro y adaptar nuestros sistemas de instalaciones en consecuencia. Conocemos los parámetros para tomar las decisiones correctas que garanticen que el proceso de producción siga funcionando de la forma más segura y sostenible posible.