Un hospital inteligente para una atención sanitaria inteligente
Imagine un hospital completamente centrado en los pacientes y sus seres queridos. Un hospital en el que cada proceso está pensado para ofrecer cuidados de la máxima calidad, de la forma más eficiente y rentable posible, con una atención óptima de los pacientes y que garantice la higiene y la seguridad. Eso es lo que Deerns ha diseñado para el Radboud UMC: un hospital que sana.
Eficiencia y flexibilidad
Los desafíos actuales en el diseño de hospitales están claros. Hay una mayor demanda de eficiencia, flexibilidad y sostenibilidad de los edificios, además de la necesidad de mantener y mejorar la calidad de la atención sanitaria, la seguridad y la experiencia de los pacientes, y el bienestar del personal sanitario. A su vez, los edificios hospitalarios deben estar preparados para el futuro y adaptarse al ritmo de las innovaciones en los diagnósticos y los tratamientos médicos, así como en el uso de la inteligencia artificial, el big data y la sanidad virtual. Cada vez es más habitual que los diagnósticos se realicen en un entorno digital. Esta circunstancia cambia los requisitos e incluso el propósito de un hospital. Menos cuidados, más curación.
Además, a la luz de la reciente pandemia y de otros acontecimientos de orden mundial, los hospitales deben volverse más flexibles y resistentes al estrés. En general, deben mostrarse resilientes y ser capaces de convertirse rápida y fácilmente en centros de atención y gestión de crisis en cualquier situación de emergencia. Por lo tanto, el sector sanitario necesitará edificios que sean adaptables. Diseñar hospitales preparados para el futuro implica tener en cuenta todos los requisitos actuales y futuros. En este sentido, el hospital Radboud UMC quería combinar un “entorno sanador” para los pacientes con un entorno eficaz de trabajo para los profesionales. Debía poder responder de forma flexible a los nuevos avances tecnológicos y de organización de la sanidad, además de ser sostenible.
Un hospital inteligente para una atención sanitaria inteligente
Deerns cuenta con una amplia experiencia y conocimientos en el ámbito de la tecnología de las instalaciones, la física de los edificios y el suministro de energía. Como parte del equipo de diseño, nuestra compañía ayuda a crear edificios sostenibles, inteligentes y preparados para el futuro, como el nuevo Radboud UMC. En este caso, lo primero que hicimos fue actualizar el nivel de inteligencia de los edificios. Los hospitales inteligentes se basan en la obtención, la estructuración y el aprovechamiento de los datos para gestionar el acceso a los espacios y la información, así como para desarrollar ideas casi en tiempo real que sirvan de apoyo en la toma de decisiones complejas y cruciales basadas en los datos. Así se facilita al personal médico, al personal de enfermería y al resto del personal sanitario un uso más eficaz y óptimo de los medios y los recursos.
Flexibilidad orientada al futuro
Una vez concluida su construcción, el edificio recibió la certificación acorde al estándar de sostenibilidad de BREEAM-NL.
El nuevo diseño técnico ha mejorado significativamente la seguridad de los pacientes sin añadir ningún tipo de carga sobre otros aspectos de la atención sanitaria. El nuevo diseño permite cambiar la función de las salas más rápidamente. La crisis de la COVID-19 ha demostrado que esto puede suponer una ventaja cuando se necesita multiplicar rápidamente el número de salas de enfermería que se usan como salas de aislamiento. Gracias a la tecnología inteligente y a la sofisticación de los sistemas de aviso, el personal sanitario puede centrar más su atención en las decisiones prioritarias.
La fortaleza de Deerns se basa en la combinación de un profundo conocimiento del diseño de hospitales vanguardistas, la experiencia en los procesos de atención y el equipamiento médico, la sostenibilidad y la tecnología para la construcción de hospitales inteligentes