¿Qué leyes y normativas se deben cumplir? ¿Cómo obtener los datos necesarios de un edificio para ahorrar energía o crear informes? ¿Cómo garantizar un determinado nivel de confort? Y, ¿con qué rapidez se recuperará la inversión en automatización de edificios y diseño de edificios inteligentes?
Nuestros expertos se ocupan a diario de estas cuestiones. Tanto la automatización de edificios como el diseño de edificios inteligentes dependen de una infraestructura TIC sólida, pero cada uno tiene un enfoque único.
La automatización de edificios proporciona la base técnica para la automatización de las instalaciones del edificio. Por ejemplo, el control de la temperatura de una sala de reuniones en función del número de ocupantes o de las condiciones meteorológicas. Pero la gestión energética también forma parte de la automatización de edificios. Un Sistema de Gestión de la Energía (SGE) permite conocer en profundidad los flujos de energía, supervisar el consumo al detalle y aplicar medidas de ahorro específicas. Así, la automatización de edificios no sólo garantiza un entorno confortable y saludable, sino también un consumo energético más eficiente con menores costes operativos.
No se puede crear un edificio inteligente sin una automatización adecuada del mismo. El diseño de Smart Building utiliza tecnologías avanzadas como IoT (Internet de las cosas), AI (inteligencia artificial) y Big Data para permitir respuestas dinámicas a las necesidades de los usuarios y a factores externos. Por ejemplo, en un edificio de oficinas inteligente, una sala de reuniones reservada puede volver a liberarse automáticamente si no se presenta nadie. Esto mejora la experiencia del usuario y la eficiencia operativa.
«La tecnología de Smart Building ofrece infinitas posibilidades», afirma Naomi Duivesteijn, Smart Building Advisor. «Por eso, en Deerns nos centramos en crear valor añadido para propietarios y usuarios. Para ello, redactamos el Programa de Requisitos (PdR) junto con el cliente, en forma de taller. Durante esta sesión interactiva, trazamos un mapa de las distintas partes interesadas y creamos recorridos de usuario para comprender sus necesidades y retos».
Servicios ofrecidos a las organizaciones
- Mapeo del nivel de Smart Building de las propiedades existentes;
- Preparación de un paquete integral de requisitos funcionales para la automatización de edificios;
- Desarrollo de una estrategia de automatización de edificios y/o de edificios inteligentes;
- La aplicación sustantiva de esta estrategia;
- El PvE, diseño y realización de los sistemas necesarios para la automatización de edificios y la construcción inteligente (por ejemplo, sistema hidráulico y de control, sistema de gestión de edificios y sistema de gestión de energía y potencia);
- Supervisión durante el proceso de diseño e implementación (commissioning);
- Gestión de costes de inversión y funcionamiento (coste total de propiedad);
- Asesoramiento sobre privacidad, estrategia y gestión de datos y ciberseguridad;
- Cumplimiento de normativas (ESG, GACS, EPBD) y certificaciones (Smartscore AP)
Tecnología que salva vidas
El impacto de la tecnología de Smart Building es quizá más visible en el sector hospitalario; en el Radboud umc de Nijmegen, el equipo de Deerns utilizó la infraestructura de automatización existente. Mediante la colocación estratégica de sensores, se dispuso de datos para un sistema de enfermería inteligente, interfonos inteligentes y detección de presencia y caídas de pacientes. Esto garantiza un mejor tiempo de respuesta y menos movimientos innecesarios, lo que permite al personal asistencial centrarse plenamente en ofrecer la mejor atención posible.
La importancia del Plan de Negocio
Un edificio bien controlado se amortiza rápidamente. Algunos ejemplos:
- El conocimiento del uso del espacio permite aumentar los ingresos de las instalaciones existentes.
- Los picos de consumo eléctrico indican problemas en las instalaciones.
- El mantenimiento predictivo evita defectos gracias a las mediciones (de vibraciones).
Aunque un diseño bien pensado para la automatización de edificios y la construcción inteligente implica inicialmente una mayor inversión, CAPEX, los costes suelen recuperarse en un plazo de 3 a 5 años gracias al ahorro operativo. Según Naomi Duivesteijn: «para que esto sea transparente para el cliente, siempre empezamos presentando un plan de negocio».